Durante este mes de diciembre estoy trabajando en un proyecto que tiene el objetivo de evaluar el recorrido, reconocer la situación actual e identificar los retos de ocho empresas de reciente constitución. Todas ellas surgen de la apuesta de personas emprendedoras que tienen en común sus estudios en Leinn. 

Se trata de actividades creadas en un tiempo no superior a los tres últimos años y todas ellas se enfocan a generar una oportunidad de vida para sus promotoras al margen de diferentes aportaciones desde una visión social. Quiero decir que todas las personas viven y quieren vivir de la capacidad de generar ingresos y rentabilidad con su trabajo.

Se trata de una muestra concreta, casual y que no responde a ninguna selección particular ni intencionada. Me surgen una serie de comentarios de la mirada en transversal de todas las experiencias :

• Todas menos una, se dirigen al mercado, a clientes y usuarios particulares, no teniendo como una referencia significativa para su desarrollo a la administración
• Todas menos una, se ubica en el entorno geográfico básico de la CAPV. La diferente se desarrolla en China
• Ninguna de ellas es una actividad de carácter industrial tal y como se entendía la industria en el pasado
• Dos de ellas, solamente dos de ellas, tienen su base en clave tecnológica
• Tres actividades tienen que ver con la alimentación, dos con la música y las otras tres con el deporte, el envejecimiento y el fomento del emprendizaje
• Un reto común a todas ellas es la búsqueda de un crecimiento superior

Al margen de estas características, ninguna de las empresas es como inicialmente fue diseñada y en base a lo que se elaboró su “estudio de viabilidad”. Todas ellas han cambiado su oferta, los clientes a los que se dirigen, los procesos básicos que se desarrollan en su interior, etc. Todas ellas son hijas del fracaso en su modelo inicial y del aprendizaje de lo que sucede al activarse la idea.