Por diferentes razones encuentro que en mi entorno de amistad son varias las personas en desempleo. Amigos y amigas que rondan los sesenta años. Personas que han trabajado de un modo continuado desde su juventud y que ahora, cerca de lo que pensaban que iba ser su jubilación, están sin trabajo.
Personas, en este caso, que han trabajado en posiciones de alta responsabilidad y muy relacionadas hacia el exterior con clientes, proveedores, competidores, administración, etc.
Cuando hablamos, manifiestan que sus opciones de empleo se rechazan porque no son jóvenes, porque les quedan poco años de trabajo o porque ya lo han dado todo.
Y todo es cierto. No quieren trabajar muchos años, tienen una edad madura y han dado mucho. Pero tienen la necesidad de seguir trabajando.
Me llama la atención que no se aproveche el que puedan dar todo aquello que han acumulado a lo largo de los años. Sus relaciones y su conocimiento.
No tienen ganas de perdurar, no tienen necesidad, por lo que su gran valor es poder dar todo su bagaje anterior, cederlo a cambio de seguir trabajando unos pocos años.
Su pretensión no es ocultar lo que saben. No quieren quedarse nada para su futuro porque, laboralmente, son solo presente.
Y su generosidad no encuentra el lugar donde sea bien recibida.
Cuánta verdad!!! Aprovechemos ese conocimiento y experiencia a tope, no los perdamos!!!
Han sido, son y seran verdaderos compañeros de batalla.
Conozco a varios de ellos y con ellos iria al fin del mundo. Siempre tienen algo que enseñar y lo hacen. AUPA ZUEK¡¡¡¡