Los modelos organizativos habituales se basan en estructuras funcionales. Las personas que trabajan juntas tienen similares conocimientos, reciben infomación restringida a su trabajo, la responsabilidad se despliega en base a las tareas funcionales y la visión es por tanto parcial, limitada a su ámbito funcional.
Hablamos de procesos transversales, de enriquecer el conocimiento, de interpretar la globalidad, de generar responbilidades sobre ámbitos de gestión más completa, de desarrollar una visión más amplia.
¿Cómo generar lo global desde la vivencia cotidiana de lo local?, ¿es posible sin cambiar el contexto organizativo?
Foto: AE